PROBLEMA
Chile es el segundo productor de salmón a nivel mundial, cuya producción pasaría de los 2,5 millones a los 4 millones de toneladas hacia 2030, según datos de la asociación SalmónChile. Las condiciones adecuadas de crianza y manejo de estas especies pueden verse alteradas por las enfermedades virales y bacterianas que afectan la salud de los peces.
Por lo mismo, la vacunación es fundamental para prevenir y controlar las enfermedades, aunque existen algunos desafíos por resolver. Sin embargo, la protección otorgada por las vacunas contra patógenos virales no siempre es alta y esta es administrada vía inyección, causando estrés al pez o daño al filete, entre otros más. Incluso, algunos de los adyuvantes que buscan mejorar la respuesta inmunológica del antígeno, han aumentado los efectos adversos. Lo ideal sería utilizar la vía oral para la vacunación, sin embargo, la respuesta inmunológica es pobre por esta vía.
SOLUCIÓN
Para dar solución a esas problemáticas, utilizando como modelo el virus de la Anemia del Salmón (ISAV), un equipo de investigación del Laboratorio de Virología del Centro de Biotecnología Acuícola de nuestra Universidad, liderado por el Dr. Eugenio Spencer Ossa y la Dra. Ana María Sandino García junto a la post doctorada Dra. Andrea Rivas, desarrollaron una vacuna oral contra la enfermedad ISAV, la cual comprende un adyuvante que es capaz de aumentar la eficacia en la protección contra la infección y nanopartículas de quitosano para su protección y absorción.
Esta invención comprende el proceso de preparación y los métodos para tratar peces infectados y estimular la respuesta inmune de estos.
BENEFICIOS
Esta vacuna oral está compuesta por nanopartículas de quitosan que encapsulan la virina (virus muerto) del virus ISA asociadas a un potente adyuvante, por lo cual se busca generar una adecuada respuesta inmune en los salmones y prevenir de forma inocua las enfermedades infecciosas que los afectan, como ISAV.
Asimismo, suministrar la vacuna por vía oral resulta ser un método amigable para el salmón, disminuyendo los niveles de estrés y daño físico, y pudiendo ser administrada a peces de todos los tamaños y sin interferir con el manejo normal de los mismos, lo cual no es posible con la vacuna intraperitoneal o intramuscular que es aplicada a peces desde los 20 gramos, dejando a los más pequeños sin protección.
De esta manera, la invención significa varios beneficios a la industria salmonera, al ayudar a mejorar los estándares de sanidad, manejo y crianza de los peces, impactando en mantener un sostenido nivel de productividad.
ESTADO DE LA TECNOLOGÍA
Se encuentra con patente concedida en Chile.