Desarrollan innovadora solución biotecnológica para recuperar suelos degradados por el cambio climático – DGT

Desarrollan innovadora solución biotecnológica para recuperar suelos degradados por el cambio climático

La Dra. Claudia Ortiz Calderón, investigadora de la Facultad de Química y Biología, lidera esta investigación aplicada, que busca entregar una herramienta sostenible para enfrentar la creciente degradación de suelos agrícolas en Chile. La iniciativa cuenta con la colaboración de la empresa GEOSIM y la ONG Quilidangui, más el apoyo de la Dirección de Gestión Tecnológica de la Vriic.

El cambio climático está alterando la calidad y fertilidad de los terrenos agrícolas, al reducir su capacidad para retener nutrientes, capturar humedad y sostener la vegetación. En respuesta a ese fenómeno, el uso de microorganismos como las cianobacterias, se ha consolidado como una solución efectiva para revertir el problema.

En este contexto, la Facultad de Química y Biología de la Usach, a través del Laboratorio de Bioquímica Vegetal y Fitorremediación, avanza en el desarrollo de una herramienta biotecnológica multifuncional basada en estos organismos vivos, para la adaptabilidad y mitigación de los suelos frente a la crisis climática.

Este proyecto es liderado por la Dra. Claudia Ortiz Calderón, investigadora y directora del laboratorio, cuenta con financiamiento de la ANID  más  la colaboración de la empresa GEOSIM, especializada en restauración y rehabilitación ambiental,  y de la ONG Quilidangui. Además, recibe el apoyo  de la Vicerrectoría de Investigación, Innovación y Creación, a través de su Dirección de Gestión Tecnológica.

“A nivel de laboratorio trabajamos con cianobacterias provenientes de la zona norte, particularmente del Desierto de Atacama, a las que expusimos a suelos con distintas concentraciones de salinidad. Los ensayos permitieron medir su alta capacidad para fijar carbono y nitrógeno, capturar sales, retener agua y aportar materia orgánica”,  explica la Dra. Claudia Ortiz.

Añade que durante este año, han testeado esta solución a nivel de campo, en áreas salinas, ubicadas en Pirque, en la Región Metropolitana, y en Quilimarí en la comuna de Los Vilos, Región de Coquimbo. A partir de los ensayos, “comprobamos que estos organismos vivos pueden aclimatarse a condiciones ambientales extremas, sin perder efectividad”, subraya la académica.

Como resultado de los avances obtenidos, el equipo presentó una solicitud de patente para resguardar la tecnología y al término de la investigación, esperan llegar a un nivel de madurez tecnológica de un TRL 5.

Impacto ambiental y comunitario

El desarrollo de esta innovación ha involucrado la colaboración con la empresa GEOSIM y la ONG Quilidangui, los cual es ampliamente valorado por ambas organizaciones.

Felipe Bravo Ríos, Gerente General de GEOSIM, sostiene que la participación en el proyecto les ha permitido “acceder a una investigación de vanguardia y metodologías científicas que enriquecen la propuesta de valor de nuestros productos y servicios”.

Añade que esta alianza con la academia, les abre oportunidades estratégicas que fortalecen nuestro posicionamiento como un actor clave en sostenibilidad y desarrollo ambiental”. También, les ayuda a “validar y mejorar procesos, asegurando que las soluciones sean efectivas y tengan un impacto positivo en el mercado, la comunidad y el medioambiente”.

Por su parte, Jessica Pizarro González, Presidenta de la ONG Quilidangui, destaca el valor de la investigación para la comunidad local, especialmente por su potencial para recuperar los terrenos salinos de Quilimarí, fuertemente afectados por la contaminación proveniente de las desaladoras.

“Generar estos espacios, sobre todo en esta zona agrícola que presenta déficit hídrico desde hace años, nos parece relevante, porque así inyectamos esta cultura y visión entre nuestros niños y niñas, para aprender que existen opciones para combatir el cambio climático”, indica la dirigente.

Finalmente, valora el trabajo conjunto con las y los investigadores de la Usach.Estoy agradecida de esta experiencia, del equipo, y de poder evidenciar que sí podemos tener alternativas para seguir adelante con nuestra zona agrícola”, puntualiza.

Autora: Paola Armijo León

Imagen: Vriic

Tags: Investigación aplicada

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